domingo, 28 de febrero de 2010

Metástasis peneana como primer signo de cáncer de pulmón

Sevket Ozkaya1, Serhat Findik 2, Atilla G Atici 2
1Samsun Chest Diseases and Thoracic Surgery Hospital, Samsun, Turquia;
2Departamento de Medicina Pulmonar, Facultad de Medicina, Ondokuz Mayis
University, Kurupelit, Samsun, Turquia.



Resumen: Por lo general, el cáncer de pulmón no produce ningún síntoma en sus primeras etapas; sin embargo, hace metástasis rápidamente. A pesar de que el cáncer de pulmón tiene el potencial de crear metástasis en todos los órganos y tejidos, la metástasis en el pene por cáncer de pulmón es muy poco frecuente. Presentamos un caso de lesión peneana como primer signo de cáncer de pulmón.
Introducción
El cáncer de pulmón es comúnmente la causa principal de muerte por cáncer en todo el mundo. Por lo general, no produce ningún síntoma en las primeras etapas; sin embargo, hace metástasis rápidamente. A pesar de que tiene el potencial de crear metástasis en todos los órganos y tejidos, los principales lugares donde crea metástasis son los huesos, el hígado, el cerebro y las glándulas suprarrenales. Aunque el pene tiene abundante vascularización, la metástasis hacia dicho órgano es muy poco frecuente. El pene es usualmente afectado por infiltración local de carcinomas de órganos adyacentes tales como la próstata, el recto, el colon y la vejiga.
Se tiene poco conocimiento sobre la metástasis peneana por cáncer de pulmón, esto es, existen pocos estudios en los que todos los pacientes fueron diagnosticados de cáncer de pulmón debido a metástasis peneana. A nuestro saber, no hay un estudio en el que se reporta una lesión peneana como primer signo de cáncer de pulmón.
Estudio del caso
Un hombre de 55 años, funcionario jubilado fue evaluado en la unidad de urología de Samsun Chest Diseases and Thoracic Surgery por presenter una lesión dolorosa con evolución de 3 meses en el pene. También manifestó tener disnea en los últimos 2 años. Negó haber tenido fiebre, producción de esputo, malestar y anorexia por pérdida de peso. De su historia médica cabe destacar el hecho de que fumaba una caja y media de cigarrillos diariamente y que fue circuncidado a la edad de siete años. No hubo ningún otro rasgo significativo ni en la historia médica referida por el mismo, ni en la historia familiar.
El paciente presentó resultados normales en el examen físico con signos vitales normales; tenía tórax en tonel. Había una reducción de los sonidos respiratorios en ambos pulmones con híperresonancia en percusión y reducción del frémito vocal al tacto. Presentó acropaquia digital en grado V. El examen urológico reveló una lesión ulcerosa con forma irregular de 2 x 2.5 cm de diámetro en el glande. El resto de los resultados del examen estuvieron dentro de los límites normales. La radiografía del tórax mostró un nódulo pulmonar solitario en la porción medial derecha e híperlucencia bilateral con hiperinflación.